lunes, julio 03, 2006

Soñé que te hacía el amor.

Pero no te asustes…
Soñé que te enseñaba algo, te llevaba
hacia un lugar desconocido.

Era el amor del cuerpo, el amor
imposible para nuestros cuerpos.

Es larga la vigilia del arrepentimiento

no sé si querías
o no querías, te dejabas

de algún modo. Soñé que te hacía el amor
y era un rito de iniciación.

Como quien duerme en el tren, acompasada
a los humores del sueño, al ritmo de los resortes
del colchón, de los grillos y el ventilador
desperté.